Recordamos brevemente que la fascitis es una inflamación del tendón de los músculos que están en la planta del pie. Se debe a que este tendón está sometido a mucha tensión.
Pues bien, tuve la feliz idea de comprarme unos zapatos baratos, pero bonitos y aparentemente buenos. El fabricante, para ahorrar costes, no le puso cambrillón en el puente que va de tacón a la suela. Eso hizo que esa zona se hundiese, aumentando aún más la tensión en la musculatura de la planta de mi pie. En 3 días ya tenía fascitis plantar y apenas podía andar. Cambié de zapatos, y rápidamente me está remitiendo.Para vergüenza mía hice verdadero el refrán de que en casa del herrero cuchara de palo.
El cambrillón sirve para reforzar la zona del arco del zapato impidiendo que se hunda.
Ignacio Nájera. Gerente de ortopedia Orto-Center. Madrid